Valderas afirma que la reglamentación de la Junta afectaría gravemente a esta práctica que realizan cerca de 70.000 pescadores. El candidato a las Cortes, Alejandro Valderas, acompañado por el candidato a la alcaldía de Valdefresno, Antonio Alonso, y el número dos a las Cortes, Luis Mariano Santos, ha manifestado hoy en rueda de prensa que UPL denuncia que la Junta atenta contra el futuro de la pesca con Mosca ahogada de la Cándana.

Desde el pasado mes de octubre, está en información pública el proyecto de “Ley de Pesca de Castilla y León”. Es una norma reglamentista, que colisionará sin duda con las competencias de las Confederaciones Hidrográficas; de nuevo se observa el desmedido interés de la Junta por ser la “única” Administración competente en la materia.

Una de las principales novedades de este proyecto, es el castigo a los pescadores de aguas interiores, ya que reduce notablemente las capturas permitidas, los lugares de pesca y las artes lícitas para la misma. Se puede afirmar que en la mitad de los ríos leoneses sólo se va a permitir la “pesca sin muerte”.

Efectivamente, las aguas leonesas en particular, se encuentran bastante degradadas en muchos tramos, pero no por causa de la pesca deportiva a la que la Junta castiga ahora, sino por otras muchas relacionadas con la mala gestión de la Junta y la dejación de funciones de las Confederaciones Hidrográficas.

Ya hemos denunciado el gran retraso de las Confederaciones Hidrográficas y de la Junta que cofinancia las obras, en la construcción de nuevas estaciones depuradoras (Valverde de la Virgen). Se aprecia un retraso en ampliar las que lo han solicitado (La Bañeza) y en reparar aquellas que nunca han estado a pleno rendimiento (las que vierten al pantano de Riaño). No hay que olvidar, que también les corresponde la vigilancia de los peligrosos vertidos incontrolados (canteras, explotaciones ganaderas) y de las obras en los cauces, en las que permiten el paso de maquinaria pesada que destruye el hábitat truchero.

Ahora denunciamos la ineficaz guardería de los ríos, competencia que se realiza por la Junta con resultados peores que cuando lo hacía el ICONA. Se hace recaer la falta de pesca, no sobre los pescadores furtivos sino sobre los que realizan su labor legalmente. Para muchos pescadores, igual que para los guardas, acercarse a ciertos cauces, es imposible por el estado selvático de las riberas.

Muchos pescadores desconfían de los métodos empleados por la Junta, para trasvasar truchas de unos ríos a otros (métodos eléctricos); parece más razonable emplear la repoblación con alevines de las piscifactorías leonesas. Asimismo Junta y CHD, no resuelven adecuadamente el problema de las especies invasivas, que merman la población truchera.

Con respecto a la reglamentación de la Junta, el número de capturas de trucha que se permiten en la “Normativa Anual de Pesca” para 2011, es la mitad de las que se autorizan en Galicia con una población truchera inferior y donde no se restringe el uso del cebo natural.

Finalmente hemos de hacer mención a que la nueva Ley, restringe enormemente el uso de las artes tradicionales de pesca leonesas: la pesca con mosca ahogada o mosca seca, hecha con plumas del Curueño. En la pasada feria de la mosca del Curueño (marzo de 2011) ya hubo una denuncia del sector, del peligro que corrían sus artes de pesca debido al exceso de control por parte de la Junta. Resulta absurdo, que ante un problema temporal como puede ser la baja cantidad de trucha en los ríos, una Ley con vocación de estar vigente décadas, ataque terriblemente el pequeño negocio de la fabricación de mosca seca, en la que León es una potencia gracias a los gallos del Curueño.

UPL sostiene que no son los pescadores leoneses, los causantes del deterioro de la pesca, sino la mala gestión que la Junta y las Confederaciones hacen de sus respectivas competencias. En nuestro programa electoral, llevamos la idea de que nuestro Patrimonio Natural, como nuestros ríos y nuestras artes de pesca tradicionales, son un valor a conservar, que debidamente regulado es una fuente de ingresos y de trabajo para nuestro jóvenes. Destrozar primero nuestros ríos por su mala gestión y ahora erradicar el turismo de pesca deportiva y un arte secular como la pesca con mosca seca del Curueño, NO es una buena política de la Junta para los leoneses. Por todo ello, UPL propondrá ante las Cortes de Castilla y León, lo siguiente:

Mayor colaboración entre las Confederaciones Hidrográficas y la Junta para ejercer sus competencias en temas como depuración, guardería, obras en cauces y márgenes, limpieza de riberas, vigilancia de vertidos…

Revisión del sistema de repoblación de truchas

Reglamentación la pesca deportiva respetando al pescador y permitiéndole una mínima actividad. Las cifras de capturas y las artes permitidas, NO deben incluirse en la Ley, sino en los decretos anuales corrigiéndolas según las necesidades.

UPL propondrá a la Junta, la declaración de Bien de Interés Cultural en el apartado de “patrimonio inmaterial”, de la elaboración de mosca ahogada o seca con plumas del Curueño, así como las artes tradicionales de pesca leonesa que se derivan de su uso, con el fin de promover su conservación y proteger su uso frente a los ataques de legislaciones disparatadas. Son parte de la Identidad Leonesa, y la mala gestión de la Junta, no es motivo para atacarlas.

Por su parte, el candidato por UPL al Ayuntamiento de Valdefresno, Antonio Alonso, propuso una serie de soluciones para la recuperación de la trucha en los ríos, que son:

SOLUCIONES PARA LA RECUPERACIÓN DE LA TRUCHA EN LOS RÍOS

1º.- Proceder al control de vertidos y escombros de canteras, cuadras etc. tanto a los ríos como a los arroyos y sus márgenes, sancionando con lo máximo permitido por la Ley a los infractores, siendo invertido el dinero de lo recaudado por este concepto en la repoblación de los ríos.

2º.- Limpiar los márgenes de los ríos para lo cual se emplearía dentro de lo posible los retenes de incendios que paga la Junta durante el verano.

3º.- Construir una piscifactoría a ser posible en cada comarca con diversos departamentos a fin de poder preservar la trucha común de cada río, aunque para lo cual sea preciso subir el precio de la licencia de pesca, por considerar que los pescadores preferirían pagar mas la licencia de pesca e ir al río y pescar alguna trucha que pagar lo que se paga actualmente y no pescar nada.

4º.- Prohibir terminantemente circular excavadoras y otros vehículos por el río, tanto para sacar presas como leña.

5º.- Una vez repobladas las piscifactorías de truchas, prohibir terminantemente el uso de la electricidad en los ríos.

6º.- Dotar a los guardas forestales de escopetas para en un principio espantar a los cormoranes. Controlar la población de nutrias, en caso de considerar que existe demasiada población se procedería a estudiar la forma de capturarlas vivas y llevarlas a otros lugares donde no existan o haya escasa población.

7º.- Levantar progresivamente parte de las prohibiciones existentes, tales como pescar a cebo natural y anzuelos de unas dimensiones normales tanto en cotos como en lo libre, si existe un cupo de capturas lo normal es que cada uno las pesque en la modalidad que ha pescado siempre si está permitida, suprimir la pesca sin muerte en muchos ríos, procediendo a crear en caso necesario vedados de pesca, aumentar el cupo de capturas según se vayan repoblando los ríos.